miércoles, 1 de abril de 2009

XVIII Congreso del PCE: el miedo a los “reconstructores”


José Marín Ibárruri

El pasado 29 de marzo se celebró un nuevo Comité Federal del Partido Comunista de España. Finalmente parece ser que no sabremos la fecha del XVIII Congreso hasta el verano, aunque lo que sí sabemos es que finalmente en Mayo se celebrará la famosa Conferencia de Organización y Finanzas.

En la reunión del domingo 29, el informe político presentado por el Secretario General decía básicamente en lo que se refiere al Partido que “hasta el próximo congreso en el partido debe haber debate, política, expresión de las distintas posiciones si las hay”. Se pide además que “los problemas o diferencias, se planteen en los órganos de dirección, procurando que el respeto político sea lo normal entre camaradas” y asegura que “las concepciones que nacen en pasillos, fruto de debates o posicionamientos sesgados, suelen acabar mal, para el partido”. Esto debería ser lo evidente, y no creo que nadie esté en desacuerdo con esas afirmaciones. El problema es que parece ser que el mensaje iba lanzado precisamente con el sector del Partido que apuesta por su reconstrucción (o fortalecimiento) como primerísima prioridad, pero no contra quienes conspiran y manejan para convertir al Partido en un mero instrumento descafeinado a merced de IU, o de los intereses particulares de este o aquel dirigente.

Sucedió el domingo algo que, sinceramente, sorprendió a muchos de los asistentes al Comité Federal. Sucedió que el Secretario de Organización, Fernando Sánchez, pidió la palabra casi al final de la reunión para dirigirse a José Marín Ibárruri. Pidió  delante de todos los asistentes que desvelase su identidad real y que saliera a la tribuna. “Seguramente está entre vosotros”, dijo. Lo sorprendente es que gran parte del Comité Federal no sabía a quien se estaba refiriendo, ni por qué lo hacía. Personalmente no comprendo por qué esos nervios de Fernando Sánchez, a quien por otro lado reconozco tenerle bastante aprecio a pesar de no conocerlo personalmente, ante dos simples artículos de opinión – repito, de opinión -, sobre cuestiones que nos preocupan a todos los militantes del PCE.

Y es que mi estimado camarada Fernando Sánchez se preocupa demasiado por determinado sector del Partido inútilmente. Puede estar bien seguro que si alguien no va a traicionar al PCE, si alguien no va anteponer cuestiones personales, económicas o tacticistas al Partido, va a ser precisamente ese sector que tanto le preocupa. Bien haría, sin embargo, en preocuparse por quienes realmente sí se dedican a hacer pactos inorgánicos y de pasillo, quienes han demostrado en más de una ocasión que están dispuestos a venderse por un plato de alfalfa saltándose cualquier tipo de organicidad. Bien haría en preocuparse por el descontento creciente de las federaciones donde los comunistas hemos sido vilipendiados de manera contínua por sinvergüenzas de la política al servicio de los más miserables intereses.

Hay muchas cosas por las que preocuparse en el PCE, pero no por quienes apostamos por su reconstrucción. Hay que preocuparse por la triste situación, por ejemplo, del Partido Comunista de Madrid, que en la última asamblea regional demostró una fuerza ínfima dentro de Izquierda Unida de Madrid. Y no es de extrañar, cuando hay más comunistas fuera que dentro del PCM, y no van a venir con nosotros mientras nuestra prioridad no sea fortalecer la organización comunista.

Y hay más cosas por la que preocuparse. Como por la alianza que se pretende entre IU e ICV, una formación que ha entrado en barrena en Cataluña y que no tiene reparos en enviar, a través del señor Saura, a los Mossos d´Esquadra a apalear estudiantes.

Y por supuesto, hay que preocuparse por la situación de los camaradas de Asturias, de Salamanca, de Extremadura. Hay que preocuparse por la próxima Fiesta del PCE. ¿Habrá o no habrá? Hay que preocuparse por el Manifiesto Programa, ¿donde se ha quedado?

Hay que preocuparse por el camarada Cayo Lara. Por todos es sabido que si hoy por hoy Cayo Lara es Coordinador General de Izquierda Unida es con la condición de que no intervenga en las federaciones conflictivas. Federaciones como Izquierda Unida de Asturias, donde incluso sus dirigentes han apostado por la disolución de IU en favor de un proyecto nacionalista. En Asturias, en Salamanca, o en Extremadura, precisamente donde nuestros camaradas han sido expulsados de IU, intentan utilizar a Cayo Lara en su favor y contra el Partido en los distintos conflictos territoriales. Cayo Lara no tiene “ejército” y proviene de una federación pequeña como es Castilla – La Mancha, por tanto, en parte no deja de estar a merced de quienes sí tienen ejército, aunque sea un ejército con brazos de madera. Por eso, no dejemos que el discurso transformador y honesto, y la decencia de un ejemplar camarada como Cayo Lara sea un trampolín para quienes han demostrado durante años no creer en la democracia interna de nuestras organizaciones.

Pero a pesar de todo estamos avanzando. Cada vez somos más los comunistas que apostamos por la reconstrucción y quienes no queremos volver a estar a merced de nada que no seamos nosotros mismos. Cada vez más y más agrupaciones locales se están reactivando o están naciendo por primera vez en muchos años. Cada vez se ven más banderas rojas y con más autoridad y orgullo ondean las hoces y los martillos.

El Partido Comunista de España va a apostar inequivocamente por su reconstrucción en el próximo Congreso, a pesar de trileros, vividores y oportunistas. A pesar de los miedos infundados. La militancia barrerá de un plumazo a quienes se aprovechan y pretendan poner en bandeja al PCE  a quienes no se dejan la vida por él. Y es que, aviso a navegantes, quienes apuestan por la reconstrucción del PCE no son una corriente: son el Partido.

4 comentarios:

  1. Camarada,

    Comparto y apoyo tus reflexiones. Es un alivio leer artículos como los que escribes.

    Un saludo y adelante!
    http://psucterrassa.blogspot.com/

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  2. He leído el documento de la próxima Conferencia del Partido y la verdad, me han dado escalofríos.

    Me parece a mi que lo que pretende el grupo criptoliquidacionista es quemar debates para que en el XVIII Congreso no se hable de nada importante. Habrá que estar atento para que los trileros no se salgan con la suya.

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  3. Hola me llamo Ana y soy del PCE en Mieres Asturias,tus articulos me parecen estupendos, son lo que una gran mayoría del partido pensamos y no nos dejan decir, porque hay que evitar las corrientes de opinión para que no se fracture el pce, o al menos para que sigan los mismos perros pero con diferentes collares. Desde asturias y en las enmiendas al documento de Organización ya vemos lo que quieren que sea el congreso XVIII, no mas que una prolongación del anterior y dejarnos mudos, mancos y cojos, ciegos ya no, porque aún nos dejan leer todas las marranadas que esta gente está cometiendo. así es que Ánimo que somos unos cuantos. SALUD Y REPUBLICA.
    HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.

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  4. Hola Ana:

    El grupo cryptoliquidacionista, que no son todos los que están, ni están todos los que son, tratará de amordazar al Partido en el próximo congreso. Yo por mi parte creo que la politica organizativa de la conferencia es positiva y nos fortalece como organización. Ahora está por ver que política se aprueba en el congreso. Una nota, quien más actúa contra la política y estatutos del Partido son los cryptoliquidacionistas, no los recuperadores (vease los comentarios de Meyer ante la ilegalización de la lista de II).

    A partir de ahora hay que trabajar con inteligencia y prudencia para que en el XVIII Congreso el PCE avance en su consolidación, soberanía e independencia tanto política como organizativa y adopte una línea acorde con los tiempos que corren, no con los años 80 y 90.

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